EL CASTAÑAZO octubre 21, 2008

Me salgo de la fila de «Salirse de la fila» para contar una anécdota humorísitica sobre un profe, en este espacio que es muy dado a la reflexión profunda pero lo ha sido poco al humor. La anécdota, en cuestión, es verídica, como diría el humorista sevillano Paco Gandía.

Viernes 17 de octubre:

• 7:40: Un profe llega, como todos los días, con gran ilusión al centro donde trabaja, porque le encanta su trabajo y también, de paso, porque es viernes.
• 7:45: El profe se dirige al almacen de material del segundo piso, del que saca un carrito alto que contiene una gran tele de las viejas, es decir, con barriga, un reproductor de vídeo y un dvd. Sale a todo prisa tirando del carrito hacia el aula donde debe dar clase a primera hora con la idea de dejarlo todo preparado para cuando el alumnado llegue.
• 7:50: Con las prisas, las ruedas del carrito golpean la junta de dilatación del suelo del pasillo, el profesor también tropieza y se desequilibra, empuja con la fuerza de ese movimiento el carrito que se tambalea peligromente. El profe, cayendo él mismo, intenta amortiguar la ya segura caída de la gran tele, pero puede sólo a medias (el vídeo y el dvd salen volando por el pasillo), dando en el suelo el carrito de acero, la tele, el vídeo y el dvd (que se han abierto como si los hubieron destripado). Gran tumulto y profesores extrañados mirando de dónde proviene el gran golpe.
• 7:55: Profe, carrito, tele, vídeo y dvd por los suelos. Profe que le da por descojonarse. Acude otro profe en su ayuda con el que ordenan el desaguisado. Resultado: vídeo y dvd inservibles. La tele, milagrosamente enciende y funciona.
• 8:00: Comienza la clase sin poderse llevar a cabo la actividad planteada. El profe le cuenta a sus alumnos lo que ha pasado y todos juntos se pitorrean del suceso. La clase se desarrolla con normalidad. Lo que no pueden ver los alumnos esa mañana se lo cuenta el profe.

Imagen tomada de aquí

NOTA: Al profe sus compañeros comienzan a conocerle como el raro que sube corriendo las escaleras y que va como una moto por los pasillos. Pero llega siempre puntual a sus clases. ¿Es un «salido» de la fila?